Madre con su hija pequeña en el regazo

Akiko Ishii con su hija, Ami, en Tokio. Fotografía de Microsoft.

Akiko Ishii tuvo que asistir a un programa de formación para el empleo en el que esperaba aprender a usar un ordenador y trabajar en una oficina. En cambio, le aconsejaron que estudiara para dar masajes terapéuticos, que esta sería una profesión adecuada para alguien como ella… que es ciega. Pero Ishii no estaba en absoluto de acuerdo.

Tras quedarse ciega a consecuencia de una operación quirúrgica a los 30 años, estaba decidida a conseguir sus objetivos. Este empeño dio sus frutos cuando obtuvo un puesto de trabajo en el departamento de relaciones humanas de una firma de TI de Tokio. Ahora, ella y su marido tienen una empresa que imparte clases de distintas materias, desde yoga hasta conocimientos prácticos sobre tecnología, a personas ciegas o con baja visión.

Ishii lleva una vida plena y en los últimos años todo le ha resultado más fácil con su “asistente”, que es como llama a Seeing AI, la aplicación gratuita de Microsoft para iOS dirigida a personas ciegas o con baja visión. Esta aplicación de la cámara utiliza “canales”, o modos, para leer texto impreso, billetes de dinero, así como describir objetos físicos, etiquetas de productos y colores, entre otros elementos. Ahora, coincidiendo con el Día Internacional de las Personas con Discapacidad promovido por las Naciones Unidas, Microsoft expande la compatibilidad de Seeing AI a cinco idiomas además del inglés: alemán, español, francés, japonés y neerlandés.

Esta compatibilidad lingüística adicional hará que Seeing AI, que utiliza inteligencia artificial (IA), sea más accesible para los millones de personas de todo el mundo que son ciegas y para el creciente número de aquellas que padecen baja visión.

“Ahora voy a poder leer en japonés. Y también podré leer el correo y otras comunicaciones y correspondencia en papel; va a ser emocionante”, afirma Ishii. Está deseosa de usar el canal de texto breve de Seeing AI, que lee en voz alta el texto tan pronto como aparece ante la cámara, así como el canal de documentos, para artículos más largos de texto impreso.

Como ella misma nos explica, antes, “si una comunicación estaba en papel, tenía que pedir a alguien que me la leyera. En cambio, ahora la podré leer yo misma”.

 Saqib Shaikh en el campus de Microsoft

“Me satisface muchísimo que los clientes nos transmitan cómo usan Seeing AI”, dice Saqib Shaikh, jefe de proyecto de Microsoft y cofundador de Seeing AI.

Este es precisamente el tipo de comentario que satisface tanto a Saqib Shaikh, jefe de proyecto de Microsoft y cofundador de Seeing AI. Él también es ciego.

“Más que la tecnología en sí misma, lo que me conmueve es la forma en que las personas han incorporado las funciones de Seeing AI en sus vidas personales”, explica Shaikh. “Me satisface muchísimo que los clientes nos transmitan cómo usan Seeing AI”.

Esto incluye un mensaje de correo electrónico de una mujer que ha usado la aplicación para leer las notas manuscritas que su madre, ya fallecida, le escribió hace años. O el caso de un padre que ha usado la función de texto breve para leer la información de los paneles y las señales del zoo a su hijo pequeño.

“Antes, este hombre se sentía desanimado, porque no podía interactuar en el zoo ni contarle a su hijo lo que tenía ante sí”, relata Shaikh. “Pero con Seeing AI, ha podido leer los carteles. Así que ahora, de pronto, ha podido experimentar ese momento padre-hijo y enseñar a su pequeño dónde viven los monos o qué comen”.

Seeing AI se lanzó en inglés en 2017 y está disponible en 70 países. La aplicación está basada en la tecnología de IA y, hasta ahora, ha ayudado a las personas a realizar más de 20 millones de tareas. Se ha desarrollado partiendo de un diseño inclusivo y las pruebas las realizan personas con discapacidad a través de organizaciones sin ánimo de lucro de todo el mundo.

Primer plano de Manuel Pereira

Manuel Pereira nos explica que considera Seeing AI su “kit de herramientas” personal. Fotografía de Microsoft.

Uno de estos evaluadores es Manuel Pereira de Francia, ciego de nacimiento. Es el director del departamento de accesibilidad digital de la AVH, una asociación que presta apoyo a personas ciegas o con baja visión para que puedan acceder a puestos de trabajo y a otros servicios. Aunque en Francia es obligatorio integrar la accesibilidad física en muchas áreas, la realidad es muy distinta en lo que se refiere a las aplicaciones web o para móviles. Esta, explica, es una de las razones por las que le encanta tener una versión en francés de Seeing AI.

Considera Seeing AI su “kit de herramientas” personal. “Contiene muchas aplicaciones útiles, como la capacidad de leer textos breves, escanear documentos, detectar la luz, etc. Lo más impresionante de esta aplicación es que ofrece gran cantidad de herramientas que puedes usar en tu vida cotidiana para disfrutar de una mayor autonomía”, añade.

“Cuando recibo una carta, por ejemplo, es muy fácil usar la aplicación para saber enseguida quién me la ha enviado. Además, puedo elegir si quiero leerla entera de inmediato o más tarde, si no es muy importante”.

 Cristian Sainz usa Seeing AI en la cocina

Cristian Sainz usa Seeing AI en su hogar para escanear el código de barras de un tarro de melocotón en almíbar de la nevera. Fotografía de Microsoft

Disponer de Seeing AI en su idioma nativo también va a ser de gran ayuda al español Cristian Sainz, devoto del arte culinario.

Sainz tiene 50 años y perdió la vista en un accidente de automóvil a los 18. En la actualidad, es responsable de la unidad de puesto de trabajo digital de la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), una fundación que ayuda a personas ciegas o con otros tipos de discapacidad visual.

Cocinero y antiguo propietario de un restaurante, Sainz señala que una de las funciones que más le gustan de Seeing AI es que puede usarla para saber las medidas exactas que necesita cuando cocina. Tiene una báscula que enuncia en voz alta los pesos de los alimentos, pero solo en intervalos de cinco gramos.

“Hay recetas en las que necesito un gramo, no cinco. Ahora, puedo obtener esa información en unos segundos. Solo tengo que apuntar el móvil con el canal de texto breve de Seeing AI a la pantalla de la báscula y la aplicación la lee en voz alta. He podido empezar a usar recetas que antes no podía hacer”.

A principios de este año se ha incorporado una función de Seeing AI desarrollada a petición de los usuarios: la posibilidad de explorar de manera táctil las fotos familiares o de las redes sociales y oír descripciones de las imágenes. Con esta función, “es muy sencillo saber qué información contienen las fotos”, confirma Sainz. “Deslizo el dedo por la pantalla y la aplicación describe dónde están los objetos en una escena”.

Florian Beijers con su perro guía

El desarrollador web Florian Beijers con su perro guía Quai en la ciudad de Arnhem, Países Bajos. Fotografía de Microsoft

Florian Beijers, de los Países Bajos, está de acuerdo. Hasta ahora, las fotografías encerraban muy poco significado para este usuario de 27 años, que nació ciego.

“Ahora, en cierto modo puedo ‘ver’ dónde está cada cosa en la imagen, qué más aparece en ella, las relaciones entre los distintos elementos”, corrobora. “El friki que llevo dentro agradece contar con esa información”.

Ese “friki que lleva dentro” condujo a Beijers a convertirse en un desarrollador web, algo que a menudo sorprende a sus futuros jefes cuando lo conocen. Aunque la mayoría de las personas comprenden que “las personas ciegas ya no nos quedamos en casa sin hacer nada”, explica Beijers, “sigo encontrándome con empresas que todavía piensan que los ciegos no usamos los ordenadores”.

Como él mismo indica, disponer de Seeing AI en neerlandés va a cambiar drásticamente su vida, porque le facilitará las tareas cotidianas en un país donde la accesibilidad no es todo lo adecuada que debería.

Según él, en los restaurantes las cartas no siempre son accesibles. “No siempre existe una versión web que se pueda consultar en el teléfono”.

Para Beijers, el canal de documentos de Seeing AI, que ofrece orientación de audio para capturar una página impresa y reconocer el texto y el formato original, “es sumamente útil, sobre todo para leer la carta en un restaurante”.

Domingos de Oliveira escucha Seeing AI

“La versión en alemán de Seeing AI va a aumentar el uso de la aplicación de forma radical”, apunta Domingos de Oliveira, experto en accesibilidad digital. Foto por cortesía de Domingos de Oliveira.

Domingos de Oliveira, experto en accesibilidad digital de Alemania, comenta que hay una expresión en su idioma para definir Seeing AI. “Usamos el término ‘Schweizer Taschenmesser’ para referirnos a las herramientas universales, como Seeing AI”; es decir, “navaja suiza”, aclara.

De Oliveira, ciego de nacimiento, nos cuenta que “en realidad, estaba obligado a relacionarme intensamente con la tecnología” cuando era más joven. “No podía hacer los deberes a mano ni escribir cartas, así que me interesé por la tecnología desde el principio para superar las barreras asociadas a la ceguera”.

Trabaja para la organización Aktion Mensch, que recauda fondos y apoya proyectos para menores y adultos con discapacidad.

“Muchos alemanes no usaban Seeing AI porque no saben suficiente inglés para entender la voz en ese idioma” en la aplicación, puntualiza. “La versión en alemán de Seeing AI va a aumentar el uso de la aplicación de forma radical”.

Madre y su hija pequeña a la mesa

“Seeing AI es mi asistente y me proporciona el apoyo que necesito para poder centrarme en cuidar de mi hija”, asevera Akiko Ishii. Fotografía de Microsoft.

Akiko Ishii opina que va a suceder lo mismo en Japón. En Tokio, existe un alto grado de concienciación respecto a la accesibilidad, señala. Pero “a medida que te alejas de la capital, todo se complica mucho”. Como nos relata, en las zonas rurales se utiliza poco la tecnología. Pero como Seeing AI es gratuita, va a ser de gran ayuda.

Ishii usa habitualmente los canales de escenas y personas de la aplicación para reconocer y describir a las personas que la rodean, incluida su hija de tres años, Ami. “Uso esta función para que me diga lo que está haciendo”, confirma Ishii.

O si Ami pide chocolate a su mamá, Ishii puede ir a la cocina y usar la aplicación para “leer el código de barras del chocolate para saber exactamente cuál es el que la pequeña quiere”. Este tipo de independencia no tiene precio, observa.

“Una de las cosas que me encantan de Seeing AI es que, una vez que tienes esta aplicación con tantas funciones, la puedes usar para lo que sea”, asegura Ishii. “Seeing AI es mi asistente y me proporciona el apoyo que necesito para poder centrarme en cuidar de mi hija”.

Obtén más información sobre Seeing AI y descarga la aplicación compatible con alemán, español, francés, inglés, japonés y neerlandés.